Evaporación – Máquina
Vivimos en constante síndrome de Casandra, sabiendo la crisis que está por venir, si no es que ya nos ha rebasado; y aún así, una parte de nosotros se niega a creerlo y hacer algo al respecto. Nos seduce tanto el poder de la máquina, producto modelo de la sociedad industrializada en que nos desenvolvemos, avanzando a tambor batiente, sin importar qué, intentando no mirar atrás, ignorando daños irreparables.
El hombre, incapaz de mantener su homeostasis, parece asimilar la belleza de un acto auto extintivo, induce su ausencia y la disfruta como espectáculo. La máquina, se ensimisma junto al agua en un nuevo ciclo, de deterioro, donde ninguno de los elementos cumple con su propósito ni su ciclo vital. Presento imágenes de agua evaporándose lentamente sobre el metal de autos, carcomiendo, lluvia ácida generada por la contaminación de la modernidad; a su vez, estas transparencias fotográficas son montadas sobre lámina misma, fundiendo diversos niveles interpretativos e incluso de técnicas.
La imagen fotográfica se enriquece al interactuar dinámicamente con el soporte, recuperando la presencialidad perdida en la cultura digital pero contradictoriamente empleando los recursos digitales. La serie de fotografía – objeto es un puente interdisciplinario e interdimensional, hay más de un punto de vista para apreciar las imágenes y los elementos tanto temática como físicamente se empalman, jugando con las estructuras que acostumbramos al apreciar e interpretar la obra de arte. Los estratos se disuelven en piezas cuya objetualidad analógica se retroalimenta de la manipulación digital. Así pues, “Evaporación – Máquina” es un híbrido con diversas fases, es una serie que considero amplia representante de mi labor como artista.
